No solo existe lo que vemos. A veces las apariencias engañan y cuando creemos que una cosa no está, de repente, surge la magia. La materia se presenta en tres estados: sólido, líquido y gaseoso. En la naturaleza, solo el agua es la sustancia que mejor los representa, por ser la única que existe de forma natural en los tres estados. Obviamente se puede producir cambios de estado cuando le aplicamos aumento de temperatura o se la disminuimos. La densidad es la relación entre la masa y el volumen que ocupa una sustancia. En este experimento ha sido muy importante la densidad, porque en este caso el gas que sale del globo y que ha llegado a apagar las velas es más denso que los gases de la atmósfera, desplazando al oxígeno que necesitaban las velas para continuar encendidas y cae al fondo.

La luz del Sol está compuesta por luz de varios colores, que son los mismos colores que se ven en el arco iris, en realidad la vemos blanca pero se descompone en estos colores, de ahí su relación. Cuando la luz del Sol toca nuestra piel nos produce la sensación de calor. Cuanto mayor sea la exposición a él mayor nivel de calor alcanzará llegando, incluso, a poder producir quemaduras, por eso se insiste tanto en protegernos, sobre todo en verano, de su exposición directa al mismo. Cuando un material recibe energía, y más concretamente, en el caso de los globos, concentrada en un punto, esto hace que este material se caliente, se dilate y deforme hasta llegar a explotar, en otros materiales incluso a salir ardiendo debido a la subida de temperatura. En nuestro entorno normalmente solemos encontrar energía que procede del Sol, en paneles solares, en forma de energía eléctrica en nuestras casas, en los "molinos", o aerogeneradores, donde se utiliza la fuerza del viento, en centrales hidroeléctricas, con la fuerza del agua, en los combustibles fósiles,....