Evidentemente nuestra realidad está formada por muchísimas más cosas de las que vemos. De hecho vivimos porque respiramos un aire que no vemos. Esto pasa porque la materia puede presentarse en distintos estados: sólido, líquido y gaseoso y en alguno de estos estados no es visible. Tampoco vemos los átomos que componen la materia y sin embargo ahí están. La materia puede pasar de un estado a otro por la influencia de causas externas, por ejemplo el agua dependiendo la temperatura a la que esté sometida. La densidad se refiere a la cantidad de masa que hay en un determinado volumen de una sustancia. En el experimento, el gas que creamos era más denso que el aire y por ese motivo se iba hacia el fondo del vaso de precipitado y también pudo “caer” sobre las velas y apagarlas.
Un circuito eléctrico para funcionar tiene que ser un circuito cerrado. Si es posible que un objeto ejerza una fuerza sobre otro sin que se toquen, sería el caso de la fuerza magnetica. Cuando situamos cerca dos imanes se atraen. La aguja señala el norte de la tierra porque se ve atraída por el polo norte de la misma.
La Luz del sol está formada por todos los colores del arco iris. La Luz del sol quema nuestra piel cuando nos exponemos a su luz. Cuando dejamos algo mucho tiempo a La Luz del sol, la materia de la que está compuesta se degrada. Energía eléctrica, eólica, solar.
Hay espectros de Luz que nuestro ojo no puede ver. Por eso tenemos que utilizar detectores artificiales que nos ayuden a hacer visible La Luz que nuestro ojo no puede ver. De esta forma pudimos comprobar que ambos tipos de luz, la que podemos ver con nuestros ojos y la que no, se comportan de la misma manera.