MISIÓN 1. EL MISTERIO DE LAS VELAS QUE SE APAGAN SOLAS. Nos ha encantado el experimento, hemos tenido de todo, repeticiones al no salir bien a la primera, caras de impaciencia, alucinación, sorpresa… Y hemos llegado tras reflexionar conjuntamente a las siguientes conclusiones: - Hemos comprobado de primera mano, que lo que no vemos también existe. Y que por supuesto existen las cosas que no vemos, pues lo hemos experimentado de primera mano. - A pesar de que no creíamos o pensábamos que era imposible apagar una vela sin soplarla ni tocarla, vimos que al echar el C02 del globo sobre el vaso con la vela encendida, se apagó al depositarla en el fondo. Y no vimos cómo el gas se hunde y cae dentro del vaso. Sentimos sorpresa al ver que las velas, se apagaron como ¡como por arte de magia! - Hemos aprendido que para mantener la llama ardiendo se necesita oxígeno. Por otro lado, que el CO2 es más denso que el aire por lo que tiende a irse hacia abajo. Como dos cosas no pueden estar en el mismo sitio a la vez, si el CO2 baja por ser más denso, el aire sube por ser menos denso. Si el aire sube, queda fuera del alcance de la vela. Sin aire no hay oxígeno y Sin oxígeno no es posible la combustión. - Fue un experimento muy divertido y sorprendente, nos encanta hacer experimentos y que los niños se diviertan aprendiendo. ¡Experimento probado y aprobado!