Hemos modificado un poco el experimento para que nos saliera bien, ya que con el vaso de precipitado , no siempre se apagaban las velas. Para asegurarnos que el gas no se escapara, colocamos las velas sobre culos de botellas de plástico cortadas, de tal forma que el dióxido de carbono se quedara concentrado en ese espacio, y pudiera ir subiendo poco a poco, desplazando al aire, hasta apagar las velas. También comprobamos que si tapábamos la boterra, tras retirar el grlobo, al cabo de un rato, con el dióxido residual que se seguía produciendo en la reacción química, lograbámos apagar tres o cuatro velas más.
En este reto hemos aprendido mucho sobre magnetismos, electricidad y electromagnetismo. Hemos visto una piedra de magnetita que atrae a objetos de hierro como por ejemplo alfileres. Después estuvimos jugando con imanes, y observamos que por un polo se atren y por otro se repelen, y no se juntan a pesar de que los intentamos juntar haciendo fuerza con las manos. Si están encima de una mesa, conforme acercamos uno, el otro se aleja, sin que se lleguen a tocar físicamente. Posteriormente construimos un circuito eléctico. Y en la tercera sesión fabricamos un electroimán conviertiendo un clavo, en un imán cuando pasaba por el cable enrollado a su alrededor la electricidad. Y para aunar todo lo que hemos visto, comprobamos que la aguja de la brújula, se desvía cuando le acercamos, la piedra de magnetita, el imán, el circuito eléctrico y el electroimán, cuando pasa por ellos la corriente eléctrica, ya que todos ellos crean campos magnéticos, que influyen en la dirección normal de la aguja de la brújula, que ya no señala el norte, cuando está cerca de ellos.